Advierte que sin cambios legales dificilmente se logrará la transformación en el sistema de salud.
La Secretaría de Salud federal pidió al Congreso de la Unión discutir y aprobar un paquete de reformas con “una regulación mucho más efectiva” de los alimentos no saludables y ultraprocesados en México, pues reconoció que sin nuevas reglas “difícilmente” tendrá éxito la transformación en el sistema de salud que empuja el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Creemos que los cambios legales que nos puedan permitir el tener un abordaje más amplio en la capacidad regulatoria del Estado de estos ambientes va a ser una pieza fundamental, y por eso el gran compromiso de trabajar de cerca con el Frente”, dijo este miércoles el director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), Ruy López Ridaura.
Al participar en el acto virtual de reinstalación del “Frente Parlamentario contra el Hambre (FPH), Capítulo México”, frente integrantes del Poder de México y de otros países latinoamericanos, asociaciones civiles y miembros de organismos internacionales, el funcionario federal enlistó a integrantes de la Cámara de Diputados y del Senado al menos tres grandes reformas.
El primero, dijo, es una ley reglamentaria que haga tangible el artículo 4 de la Constitución que garantiza como derecho humano la alimentación adecuada. “Creemos que ahorita es la oportunidad para que en esta nueva iniciativa de una Ley Reglamentaria para el Derecho a una Alimentación Saludable pueden dar, pueden florecer muchas de las iniciativas que también desde el gobierno y desde el Ejecutivo, y especialmente de este grupo intersecretarial impulsamos”, dijo.
Como segundo punto, resaltó que se necesita ir más allá de la normatividad oficial del etiquetado de alimentos industrializados en México. “Tiene un componente muy importante de comunicación a las personas, al consumidor, pero también tiene que ser clave para la regulación ambientes escolares, de ambientes laborales y para muchas otras políticas públicas que pueden partir desde la conformación de esta definición de alimentos que tienen etiquetado de advertencia para que a partir de ahí tener una regulación mucho más efectiva.
Otro de los pendientes, dijo, es “hacer realidad la firma y la adhesión de México a este Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de Leche Materna. Creemos que este es uno de los objetivos fundamentales y debemos de tener la capacidad regulatoria del Estado”. López Ridaura resaltó que el gobierno federal está trabajando en la transformación del sistema de salud, a fin de garantizar que su servicio sea gratuito y universal.
“Pero si esto no va acompañado de una transformación, también de los cambios o determinantes estructurales que están motivando que las personas tengan dietas menos saludables, difícilmente se va a lograr con una transformación del sector de atención médico. Y es por eso que aquí las políticas públicas son fundamentales”, advirtió.
En la reinstalación del equipo de trabajo que representa a México en el Frente Parlamentario contra el Hambre, órgano integrado por un grupo plural de legisladores de 21 países de la región, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera expuso acciones nacionales para “la materialización del derecho a la alimentación adecuada”.
“Como son la garantía legal del derecho al consumo informado, la preservación de semillas nativas y las formas tradicionales de producción agrícola y lograr legislaciones generales que reglamenten los derechos fundamentales a la alimentación, al agua y al saneamiento”, explicó la también coordinadora del FPH Capítulo México.
En tanto, la vicecoordinadora de la bancada de Morena la Cámara de Diputados, Aleida Alavez Ruiz, aseguró que su grupo impulsará en esta legislatura todas las reformas necesarias para garantizar en México una alimentación adecuada. “En este momento cabría preguntarnos ¿los problemas de alimentación son por falta de alimentos o por desigualdad en el acceso a ellos, o es una combinación de ambas?”, dijo.